El 7 de febrero de 2024 tuve el privilegio de compartir con los líderes de la INTECFRA, empresa integradora de tecnologías de la información para reducir gastos, costos y tiempos en la operación de sus clientes, la importancia de que como líderes de la empresa requieren conocer sus propias emociones y tomar conciencia de qué significa cada una de éstas, a fin de que conozcan cómo pueden impactar en la gente que está a su cargo, y en su vida propia.
Agradezco a Alejandra López Castañeda y Sergio Arreguin, consultores de la empresa GROWTH INSTITUTE por su confianza para compartir el tema descrito y provocar la curiosidad en Aurelio, Gerardo, Marco y Diego para conocer aún más sobre el tema.
Son diversos especialistas en procesos de negocio que destacan la importancia de que los líderes en su actuar diario pueden inspirar a las nuevas generaciones al interior de las empresas para alcanzar con creces los objetivos del negocio.
El actuar de estos líderes permite a través de una comunicación asertiva y escucha empática quienes guían a los equipos y contribuyen en el adecuado clima laboral y la salud de los trabajadores, pero qué pasa cuando no están bien emocionalmente, ¿cómo afecta a los colaboradores y a la compañía?
La editora especializada en Pymes del periódico El Economista nos comparte a través de su columna del 13 de octubre de 2021 que “La carga de trabajo es el principal factor que genera estrés en los líderes mexicanos, así lo revela una encuesta realizada por evaluar basado en la Norma Oficial Mexicana NOM-035, donde 56% de los líderes señaló que la exigencia del cargo que desempeñan junto con las responsabilidades y las tareas son motivos de estrés, lo cual afecta la productividad y el estado emocional.”
Mi recomendación a los líderes de las empresas y a los responsables de áreas de las empresas son las mismas: duerma bien, aliméntese sanamente, realice ejercicio aeróbico, lea mucho, respete su agenda de trabajo y la personal, entre otros.
¡Gracias por la deliciosa birria que comimos en Zapopan, Jalisco!