El 11 de junio de 2024 se llevó a cabo en el Auditorio de la Policía Morelia, en esta ciudad capital del estado de Michoacán, el Conversatorio relacionado con la salud mental de las y los integrantes de la corporación.
La naturaleza del trabajo policial, que está asociada con el incremento en formas de estrés que incluyen el físico, el psicosocial y la ansiedad anticipatoria. Al estar diariamente expuestas a eventos traumáticos ––como lidiar con violencia doméstica, choques automovilísticos, homicidios, altercados entre vecinos, etc.––, las personas oficiales de policía tienen altas probabilidades de desarrollar ansiedad, depresión, somatización, trastorno por estrés postraumático (PTSD por sus siglas en inglés) o síndrome de
burnout o agotamiento extremo.
Las personas policías son más propensas a enfermedades mentales que la población general debido a los estresores con los que conviven diariamente. Estos factores de estrés se pueden dividir en tres categorías: disgustos diarios, eventos críticos y eventos traumáticos. Los primeros, que pueden ser el estrés diario de un policía al lidiar con vecinos poco cooperativos, presión laboral o la jornada diaria, no son tan intensos como para convertirse en una crisis, pero pueden convertirse en una situación crónica que resulte en un trastorno mental.
El primer paso es reconocer que la salud mental de nuestras y nuestros policías es un problema de salud pública que requiere ser atendido por el Estado.
Atendiendo la invitación del Comisionado de la Policía Morelia, el doctor Alejandro González Cussi, también estampé mi firma en los Compromisos por la
#saludmental de las y los integrantes de la
#PolicíaDeMorelia.
Gracias por la invitación
Juan Zizumbo.