En esta fecha especial en México; 23 de octubre Día del Médico, tuve el gusto de atender una entrevista para TV AZTECA MICHOACÁN para comentar sobre los alimentos asociados a la depresión y que de acuerdo a las investigaciones de instituciones respetables y artículos difundidos en revistas prestigiadas como Nature, en efecto, si no se tiene una nutrición adecuada durante la infancia, muy probablemente al paso de los años se tenga predisposición a numerosas enfermedades, entre ellas las enfermedades mentales como la depresión.
Los adultos pueden ayudar a prevenirla en sus hijos si consideran una alimentación sana y evitan dietas altas en calorías basadas en gran cantidad de carbohidratos, pero pocas proteínas y nutrientes esenciales.
Si no se tiene una nutrición adecuada durante la infancia, es probable que más adelante se tenga predisposición a numerosas enfermedades, entre ellas las enfermedades mentales como la depresión.
Los adultos pueden ayudar a prevenirla si llevan una alimentación sana y evitan dietas altas en calorías basadas en gran cantidad de carbohidratos refinados, pero pocas proteínas y nutrientes esenciales. Los alimentos procesados como la comida rápida, las bebidas azucaradas, es decir, la "comida chatarra", es recomendable reflexionar sobre los efectos dañinos que pueden provocar en los menores de edad.
Los alimentos altos en acidos grasos poliinsaturados omega-3, que se encuentra en los pescados de agua fría, ayudan a mejorar estados depresivos, así como las hortalizas, el pollo, los huevos de igual manera. Las frutas con gran contenido de triptofano, un aminoacido que estimula la serotonina que contribuye a la tranquilidad, relajación y bienestar de las personas.
En México 2 de cada 100 niños presentan depresión, así como 5 de cada 100 adolescentes.
Es deber de todos cuidar la salud de la niñez.